Hace unos días, os comenté que me había hecho un carnet de la biblio y que había sacado de inicio "La profecía" y "Nocilla Dream".
El primero impresionante, había visto la peli, pero me faltaba la raiz. Lo recomiendo mazo mil.... El segundo, el de la Nocilla, puessssss, lo dejé en la página 40 más o menos, hay muy poco tiempo con todo lo que existe para leer, como para perder el tiempo con algo que, desde mi punto de vista merece casi cero la pena. Y me obligé desde la página 15 o por ahí, pero hubo un momento en el que me dije: "Irreal tirar el tiempo en truños Cris"
Están bien las citas de otros, poco más. Me decepcioné la verdad, esperaba otra cosa, pero es una rarunez, no de friki guay, de rarunez nerd tal cual.
Cuando fuí a devolverlos, cogí uno de Kenzaburo Oé "Una cuestión personal" y "La muerte de Amalia Sacerdote" de Andrea Camillieri... Y antes de meter las manos en la masa, he de decir que Kenzaburo siempre es Kenzaburo, aunque yo a día de hoy no estoy para leer cosas con tanta dureza en el argumento, aunque me moló vaya. Es sólo cosa de mi momento personal.
Pero lo más importante y aquí viene lo más grande y mejor, descubrí al maestro Camilleri.
Debo decir en este punto, que yo soy de hace mucho fanática de Mario Puzo, pero que ya me he leído toda su obra, de hecho Turi (el gato que tiene mi ex y antes era mío) se llama así por Salvatore Giuliano, de "El Siciliano".
Desde entonces, buscaba algo parecido y nada me colmaba, probé con Saviano, pero no, ni de lejos. El caso es que aunque había oído hablar de Andrea, no lo había leído. Ahora ya sí y me he enamorado. De hecho, el primer libro suyo me lo engullí en un solo día. IM-PRE-SIO-NAN-TE.
En este momento, estoy con "Un mes con Montalbano" y me he flipado del personaje. Me voy a beber su obra de la biblio y luego buscaré fuera lo que me falta. Ainssss que bien.
En fin, que en lo que espero que me presten "El temor de un hombre sabio", segunda parte de "El nombre del viento", que me lo deja la Beíta el sábado (me sobra aún demasiado mes a final de sueldo y no puedo comprarlo... Sólo por ahora); seguiré leyendo al maestro Camillieri. Le llamo maestro porque soy muy mitómana, pero esto ya lo sabéis ¿no? ja ja ja.
Viva la vidaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa.
Oye que me resuena una canción:
Gracias a la vida que me ha dado tanto
....
Y a mi familia y amig@s,
por estar siempre para todo.
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