El universo conspira a tu favor

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martes, 26 de noviembre de 2013

Look de la semana


Calle Fuencarral.

Madrid.

LaKariKala.



El viernes noche estuve de inauguración, Madrid es lo que tiene, siempre hay algo que celebrar. Y esta fiesta fue maravillosa, en todos los sentidos... Ahora lo pienso y me digo: "- Hay que ver lo que nos gusta aquí un bochinche".

Abría en Malasaña, en la calle de la Palma nº20, una tienda-espacio de restauración y venta de muebles vintage. Me enamoré de todo. De los muebles, de los detalles, de la forma de hacer.

He capturado algunas imágenes para vosotr@s. También tienen página en facebook, que ahí si os apetece siempre podréis ver más de lo que yo os enseñe: "Taller de restauración Lakari Kala". 

La otra opción, que a mí me parece mejor, es el directo.

Vamos a empezar ya, que no hace falta que yo me líe a escribir, con que veáis, entenderéis...


 Entramos en monopatín.



 Estas cajas, donde todavía pega guardar cartas de verdad...

Por poner un ejemplo.



 Alacena y silla.



 *le da al botón de "Me gusta"*



 Spain... Por lo menos el coche...

Jajaja.

;)



Y hablando de lo que pega:
 
Aquí, sentarse con un libro y una manta, subir las piernas y dejar una única lamparita encendida.
Recomendación: 
Si se siene gato, que se haga un ovillo en nuestro regazo.

#Perfección 



 Vintage.

*Suena "Over the Rainbow"*


 
 Es que todo es monería.



 Esta mesilla al lado de mi cama.
Yo lo veo.



 Y aquí desayunar juntos... Café, y besos.



 Tenéis que verlo. No puedo decir más.







The end.

sábado, 23 de noviembre de 2013

Madrid... Paseito.

 Subimos por la Calle Toledo.



 Llegamos a la Plaza Mayor



 *No suena musiquilla porque esta apagado. La imagina.*



 Un momento, antes paramos en esta tienda.
(Cuando está abierta, claro)



 La iglesia otra cosa no, pero infraestructura...
Aquí no compramos.



 Hablamos desde las casas.



Llegamos a Ópera.
Ayer en Madrid hacía sol.

FIN.




Hasta que volvamos a olernos.
Sssshhhh.

Que me sorprenda





"- ¿Qué va a ser de nosotras?
¿Qué va a ser de nuestras vidas?"

Antón Chéjov



... Yo agradezco tanto no saber qué va a ser de mi vida. Me aterraría conocer lo que me va a pasar de aquí a que me muera. Es como si estás viendo una peli y te cuentan el final. Ya no apetece verla. Yo quiero que me sorprenda.



A Peter.

Olor a héroe

Foto El Mundo
(no leo este periódico, pero si la foto es suya, es suya)



Érase una vez una tarde de esta semana... Trabajé poco, la verdad. Los bomberos, la policía... y un poco el SAMUR, tuvieron que cortar la calle de mi curro.

Resulta que el yonki del bloque de al lado prendió con una plata el zulo en el que vivía.

Cuentan en el barrio (porque en este tipo de tiendas te acabas conociendo con los vecinos) que en los años 80 era el más guapo de todos; tenía el pelo largo, y estaba lleno de ideales, pero Madrid y "La movida" se lo comieron, como a tantos... Ahora no tiene pierna.

Le salvaron el zulo y al gato, que es el único que le queda a la vera, y que estaba muy asustado. Cuando apagaron el fuego, se escapó y volvió corriendo a la casa a esconderse... Es su casa.

Los bomberos vinieron súper rápido; y lo hicieron cobrando un 15% menos de salario, con un recorte en los días libres que les corresponden por el tipo de trabajo que desempeñan, y una jornada laboral más larga.

Una tarde de esta semana, en el centro de Madrid olía a quemado, y sin embargo, olía a héroe.

miércoles, 13 de noviembre de 2013

Hasta que volvamos a olernos.


Hasta que volvamos a olernos.

Muakkkkkkkkk.


Shhhhhhhhhh.

;)

Semana por Madrid


Los días que nos regalan el sol, la Cuesta de Moyano está más bonita que nunca. 
Amo esta calle.



 Velázquez en el Prado.



 El Prado
...



 ...
De noche.


 
 En pleno Madrid quedan casitas como esta.



 Y ya nos adornan la puerta del Sol.
Es que este año lo patrocina "La lotería"




Pero la huelga, se ve, se huele, aunque la quieran negar.



 los Madrileños somos muchooooooooo.
¡¡¡¡¡¡¡Jajajajajajajajaja!!!!!!!

(?)


 Fuencarral.



 Glam



Y para decir: Fin.

Pai Sansa se duerme en mi muslo.


Shhhhh.
A soñar, Madrid.

Los cuentos fantásticos del XIX.

Cuenta Philarète Chasles que en Escocia se cree en todo tipo de duendes y en las cabañas se discute de filosofía.

También dice, y lo puedo reproducir porque murió hace siglos y sus derechos han expirado como los de Shakespeare...

[...] Todos los crímenes cometidos en Escocia desde hacía veinte años estaban allí, tapizando los muros de la iglesia abandonada a los demonios.


[...] Se prometía, pues, una y otra vez, vencer su miedo y gozar del singular regalo que el cielo o el infierno le habían enviado.


Todo esto y más, en "El ojo sin párpado".


PD: Ya os hablaré de este libro cuando lo acabe, merece una crítica, y más aún, merece ser leído.

Amiguis: Ya.

Ilustración by Elena Idígoras.


A:
Tía, ya.


B:
Ya, tía.


A:
Es que me cago en todo ya.


B:
Ya, ya...


A:
Gracias.


B:
A ti.




A Natalia. Gracias.

Amiguis: Era fea...

Ilustración by Elena Idígoras.


A:
La gilipollas esa; que no era gilipollas,
lo que era de verdad es fea.


B:
Un poco gilipollas también era, eh.


A:
Bueno, sí, un poco también.



Podium semanal de pies en la calle.


El top tres de la semana es este:

Para empezar, una monería de zapatos de los que se llevan siempre, con unos leotardos reinventados. Pegan tanto con falda o vestido, como con unos vaqueros rectos mega viejos; si me apuras, hasta con unos pitillo, aunque esto último no lo voy a jurar por Dios.

¿Que son muy Tamara Falcó? Mejor que ser Lady 23.




 Piernas.

Me gustan, y las botas y el mirovestido de lana, también.

 


Y para acabar. 
Por las noches de Madrid, Le coq sportif. Muero de amor.



No tengo más que decir.

...
Bueno, sí:

Wiiiiiiiiiiiii.

Acción valiente del día: Un Wiiiiiiiiii

Esconderte entre los pasillos silenciosos de la biblioteca y decir:

Wiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii...



#PostSerio

Microcuento: Sin Título

Ilustración by Elena Idígoras



Siempre que la escuchaba recordaba el motivo por el que la quería tanto. El inconveniente era que hablaban cada mucho tiempo.

Un día que llamó, descolgaron el teléfono en un Starbucks, allí ya no vivía nadie. 


Los ojos abiertos

Se quitó las gafas, dobló las patillas con mimo y las colocó sobre el libro que acababa de cerrar. Se recostó y llamó al gato - ven Azrael, ven-. El animal acudió al instante y se aovilló en su barriga emitiendo un leve ronroneo.

Suspiró profundamente y apagó la lámpara. Mantuvo los ojos abiertos.

Hacía ya casi un mes de la primera llamada. En el instante en que caían sus párpados retumbaba el teléfono. Al principio pensó en un error o una broma de mal gusto, porque siempre se acostaba a una hora similar. Por eso cuando unos días después de que comenzara todo decidió cambiar sus hábitos y horarios, y justo al  cerrar los ojos, sonó de igual manera, empezó a preocuparse.

Consideró que alguien la espiaba, así que cerraba todas las persianas a cal y canto cada vez que se dirigía a la cama; el rigor de las noches de agosto se hizo aún más axfisiante. También cogió la costumbre de atrancar la puerta de la entrada con una silla además de echar los candados.

Su vida se resentía. Los días se volvieron agotadores.

Tres noches antes, probó a desenchufar el aparato a media tarde para que al llegar la noche, este, no tuviese batería; las tres se había descargado completamente cuando se acostó, había esperado hasta ello. El teléfono, sin embargo, había seguido sonando.

María no podía cerrar los ojos, no quería hacerlo.



ropadeletras
#ExperimentoDelDía
Gracias por el libro.

Ando

Hola. Muy buenas.

Os dije que me iba a tomar unos ratitos de los míos porque tenía que vivir, también que leer y que mirar para adentro antes de seguir escribiendo. Tampoco ha sido así del todo. He escrito, aunque no en exceso, y las moleskines iban conmigo a todas partes; lo único es que no he publicado, no sentía el momento, y ya sabéis que yo me muevo por las chichas.

Hoy me lo pide el cuerpo; de noche como los gatos.

Me pongo a ello pues, Ladies and gentlemen; con un café, que las horas son las que son, llevo mucha tralla hoy en el cuerpo, y vengo a darlo todo.

Gracias a quien siga ahí, esperando por si escribo... y a quien no, pues no es que vaya a agradecérselo, pero que lo entiendo perfectamente, faltaría más.