…Y de repente me asusté. Sí, me acojoné como un pajarito. Yo que para muchas cosas, nunca he tenido filtro como los niños. Me ví empezando a ser “madura” del tirón, con el culo casi caído (bueno, no mentira, que yo soy mucho de exagerar; caído no), pero sí, sin saber hacer otra cosa que:
- Bailar contemporaneo –método limón-, escuchar, escribir cuentos personalizados, y hacer reiki. Remodelarte la casa feng Shui, y hacer maletas con estilo y cabeza, decorar casas con juguetes modernos y retros. Hacer de musa. hacer comidas rosas (ricas), escribir del revés… Calcular buenas estrategias de paradas en carreras de F1… Hacer de personal shopper, practicar el arts memorians; adelantarme y cazar tendencias; customizar cosas… (¿Qué son cosas guays?, ¡sí!, ¿Pero que por hacer esto; no suelen pagar la mayoría de las veces?... ¡Pues no!).
Fíjate si se de estupideces, que hasta entiendo de aguas minerales –un hobby-.
- Y rollo práctico: Se descargar camiones de ropa y también se limpiar con amoniaco, que además me gusta el pedillo que da, pero es que por limpiar, pagan muy poco… Y tratan también… muy poco… Como por descargar camiones; que encima, te rompe los lomos.
Y a lo que iba, antes de desviarme de mi camino dramático… que me lesioné, y empecé a fumar -1 paquete diario-. Y todo lo que había estado tantos años persiguiendo (de momento los dieciséis últimos); se fué por el retrete en cero coma…
CONTINUARÁ…
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