El precio del éxito

Leyendo el Vogue de este mes, que está bastante bien la verdad, me he encontrado con una entrevista a Roberto Saviano, el autor de "Gomorra".

Habla de cómo, después de haber vendido más de 5 millones de ejemplares de su primera y hasta el momento única novela en todo el mundo, no puede disfrutar con libertad de ello, porque está amenazado de muerte por la mafia.

Llegados a este punto, una se pregunta, ¿por qué la vida es tan "cómica"?, te pasas la vida formándote, o no bueno, pero intentando vivir de lo que te hace feliz y de pronto, pegas un petardazo con algo, en este caso una novela y no te puedes permitir vivir por mucho que tengas.

El dice, que ni siquiera se puede relacionar de un modo normal, claro; ¿a qué chica le dices tú vente a dormir pero estate atenta por si hay que salir corriendo en bragas, o nos matan?.

La gente no le quiere alquilar pisos y se pasa la vida rodeado de escoltas porque no se puede fiar de nadie.... Ufff, es gore no poder tener ni amigos... Y su familia poco más o menos y encima no han elegido el hecho de arriesgarse escribiendo.

Mira que yo le pido a la vida ser escritora de éxito internacional y vivir cómodamente de ello... Bueno que por pedir... Pero no me he planteado nunca que me pudiese pasar algo así por contar y si lo pienso digo, upsssss! que miedo más grande Dios Bendito del amor hermoso.

Vale que yo en ocasiones me censuro a mi misma por miedo a las querellas, pero llegados a este punto me digo, "- No Reina", hay que censurarse por los posibles tiros en la cabeza. O a lo mejor no, a lo mejor ser una cobardica como yo tampoco tiene sentido si eres artista.

No sé que deciros, yo quiero vivir del cuento, pero de un cuento tranquilo, que no me haga mirarme las espaldas cada 2 segundos por si detrás tengo a un Corleone (uso este apellido por ficticio y por cobarde de nuevo)... Mira lo ideal es ser como la Rowling, que además de leída y rica, es respetada...

Aunque también lo era John Lennon y apareció un zumbado...

Pues eso, que todo tiene un precio y a veces, el de el éxito es más alto que el del fracaso, por eso quizás en muchas ocasiones un@ se boicotea... por el pánico a lo que pueda ocurrir luego... Pero el miedo tampoco es bueno, que paraliza. Así que esta vez, toca tirar para delante de forma valiente. Amén.

;)