Ayer viví una cosa preciosa en Lavapies, más allá de la victoria de España y el beso de Iker a Sara, que también...
Pero anoche vi acontecer el hermanamiento de pueblos más bonito del mundo.
Senegaleses, Bangladesies, Marroquíes, Peruanos, Colombianos, Argentinos, Chinos... Cantaban junto a nosotros bajo un mismo corazón el: "Yo soy Español"
Y llevaban de compañera, no solo nuestra alegría, también nuestros colores pintados en la cara, nuestras camisetas y banderas junto a las suyas...
Ayer lloré mucho de alegría, por el campeonato del mundo y por ver, que como creyó Mandela en su momento, el deporte hace que todo sea posible...
Sí, sentí, como muchos pueblos se hacían nuestros hermanos, que aunque no de sangre y patria, se han unido a nosotros para siempre de forma indisoluble.
No sé por qué, pero no para de sonar en mi cabeza "The circle of life" de Elthon Jhon... Y que venga la SGAE si quiere a cobrarme por soñar, que de ahora en adelante, por siempre jamás, voy a seguir echándole cuenta a los sueños de la vida.
Te quiero España.
Te quiero Mundo.
Por mi, por todos mis compañeros
y por mi el primero.
:)
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